Este año fimé un convenio con la Universidad Internacional de Valencia para colaborar como tutora de prácticas externas. Durante los últimos meses, he trabajado con una alumna del último curso del grado y le he pedido que comparta su experiencia con nosotras.
Ana Gloria Otero es violinista con una amplia trayectoria laboral. Actualmente, compagina sus estudios con la enseñanza musical y la dirección de una orquesta formada por pequeños violinistas, todos estudiantes en etapa infantil. Además, proviene de una familia relacionada con el mundo de la medicina. Este bagaje personal es el responsable de su inclinación hacia la traducción musical y la traducción médica / veterinaria.
¿Cómo es el proceso para elegir prácticas profesionales en tu universidad?
El proceso de selección de prácticas supone un gran estrés para el alumnado. La universidad te indica que eres tú quien debe ocuparse de buscar la empresa donde hacer las prácticas. Sin embargo, si llegado el momento de empezar las prácticas, no conseguiste ninguna empresa, ellos buscan opciones entre empresas con las que tienen convenios.
El miedo a quedarte sin lugar donde realizar las prácticas ha llevado a muchos compañeros a aceptar malas condiciones laborales.
Tengo compañeros que se quejan porque tienen que aceptar hacer más horas de prácticas que las establecidas en el convenio con la universidad. Otros me cuentan que no saben con qué gestor se están relacionando o que les envían mucho trabajo con plazos de entrega muy cortos. A veces la comunicación con las empresas no es fluida y se pasan semanas sin saber nada del tutor. En muchas ocasiones, no reciben feedfack y eso deteriora la experiencia formativa.
La mayoría de las veces no recibes respuesta. Es desalentador.
No es nada fácil. Envié correos a muchísimas agencias, y también contacté telefónicamente, sin obtener ningún resultado positivo. No obstante, creo que por muchas negativas que recibas siempre terminas encontrando a la persona que te pueda ayudar, como es mi caso.
¿Cómo describirías la experiencia de hacer las prácticas con una traductora autónoma?
Tenía mucho miedo a las prácticas porque no sabía a qué me iba a enfrentar. Durante la carrera, nadie te prepara para este momento, mucho menos para la vida laboral. Ya que es la antesala de nuestro futuro como traductores, creo que es de vital importancia poder hacerlas con alguien que se implique y que se lo tome en serio.
Que aceptaras ser mi tutora de prácticas ha sido para mí como ganar la lotería. Esta experiencia ha sido una de las cosas más importantes que me han ocurrido en estos cuatro años de carrera.
A diferencia de muchos de mis compañeros, yo he disfrutado de este período al máximo. Para mí fue algo real, no lo he visto como unas prácticas. La planificación y la división de la formación en clases teóricas y prácticas, me ha permitido abordar puntos de esta profesión que no tenía en mente, como la creación de mi cv o aprender sobre facturas, seguridad social, hacienda y mucho más.
Con gran honestidad puedo decir que solo he visto ventajas a esta formación. El trato ha sido personalizado, no he sido un número dentro de una empresa. Además, has elegido una gran variedad de textos para traducir, tocando diferentes temas para ver con cuál de ellos me sentía más cómoda, hemos utilizado herramientas TAO, elaborado glosarios, ¿qué más puedo pedir?
¿Qué has aprendido? ¿Has descubierto algo que haya cambiado tu opinión en cuanto a la profesión?
He aprendido muchísimo, desde cosas básicas como que hay que firmar un acuerdo de confidencialidad con la persona o empresa que te contrata hasta darme cuenta de algunos errores lingüísticos o gramaticales que he cometido en mis traducciones, algunos de manera repetitiva. También he aprendido a organizarme para poder compaginar mi trabajo real con las prácticas.
Me has concienciado de lo necesario que es saber buscar la información. No puedo decir que haya cambiado mi opinión en cuanto a la profesión, digamos que se ha moldeado. He adquirido información que antes no tenía y por ello soy del firme criterio que has y estás jugando un papel fundamental en mi carrera.
¿Crees que estas prácticas te han preparado para el mundo laboral? ¿Echas algo en falta?
Rotundamente, sí. Ahora tengo una visión más clara de lo que me espera en mi futura vida laboral. Aunque sigo teniendo el mismo miedo de hace unos meses, después de nuestras charlas y de los consejos que me das, digamos que veo cierta luz al final del túnel.
El futuro se presenta incierto, no imposible.
Sé que es difícil empezar, pero me has dado herramientas que intentaré usar sabiamente. Está claro que tu profunda implicación en estas prácticas es la razón de mi optimismo hacia el futuro, que aunque se presenta incierto no parece imposible.
¿Algo en falta? No creo, pero así grosso modo, igual me hubiera gustado discutir alguno de nuestros textos en persona, con un lápiz y un papel, quien sabe si algún día podremos hacerlo.